Sé parte de la capacitación gratuita a instituciones públicas y privadas de todo Chile sobre inclusión laboral

Desde la entrada en vigencia de la ley 21.015 hace dos años, las personas y organizaciones entorno al mundo de la discapacidad hemos mirado expectantes los favorables resultados que ha tenido esta medida.Desde un inicio, fuimos muy críticos con la obligatoriedad de alcanzar una cifra, sin existir una orientación técnica hacia las empresas que guiara el proceder. A pesar de ese vacío, actualmente muchas empresas han decidido exigirse aún más allá de la reserva del 1% de sus contratos, muchas veces incluso duplicando esta medida, y haciendo esfuerzos transversales para generar cambios hacia una cultura inclusiva con la mirada puesta en impactar positivamente en la calidad de vida de sus trabajadores.Hasta hace un mes veíamos el escenario de la inclusión laboral con un creciente interés y compromiso por parte de las empresas en valorar la diversidad y ampliar las opciones de las personas con discapacidad, tanto para acceder al trabajo como para desarrollar una carrera laboral.Lamentablemente, las últimas semanas hemos sido testigos de cómo nuestro sistema no está entregando apoyos a las empresas en la toma de medidas que permitan la sostenibilidad de las mismas, y a la vez, que logren conciliar con el cuidado de sus trabajadores.Considerando que sólo la obligación pudo lograr la incorporación masiva de las personas con discapacidad al ámbito laboral, para disminuir la enorme brecha que existía antes de la entrada en vigencia de la ley, bien cabe preguntarse cuánto impactará esta crisis sanitaria, que rápidamente se ha vuelto una crisis económica, en el futuro a corto plazo de la inclusión laboral.Por nuestra parte, continuaremos haciendo lo que esté a nuestro alcance para promover la inclusión social y laboral, y a la vez confiamos en que las empresas que han realizado un trabajo responsable de inclusión y cambio cultural se hayan convencido del aporte que las personas con discapacidad hacen a los equipos de trabajo, tanto humana como laboralmente, y no retrocedamos en lo hasta ahora alcanzado en la entrega de igualdad de derechos y oportunidades a todas las personas.Bernardita López RadrigánDirectora Ejecutiva de AVANZA Inclusión