La primera participación de nuestro país en unos Juegos Paralímpicos fue en Barcelona 1992 y desde entonces ha estado presente en todos. En esa primera instancia participaron solo dos atletas, que compitieron en levantamiento de pesas y natación. Este año, en Tokio 2020, la concurrencia fue bastante mayor, con 19 atletas en siete disciplinas, llenándonos de orgullo y alegría durante trece días.
Resulta impresionante la impecable participación que tuvo el equipo, obteniendo seis medallas: dos de oro, tres de plata y una de bronce. Además del récord mundial de Francisca Mardones en el lanzamiento de la bala.
No podemos desconocer que estos significativos logros son el resultado de un proceso de preparación y entrenamientos que, en el marco de la pandemia, se debe haber visto interferido por las restricciones sanitarias y confinamientos, afectando el desarrollo normal de sus rutinas y actividades físicas. Sin embargo, el talento y esfuerzo de cada uno de los deportistas permitieron una tremenda participación.
Reconocemos y agradecemos la cobertura mediática que tuvieron estos Juegos. Gracias a ello, vimos a una audiencia mucho más interesada en conocer sobre estos atletas, siendo testigos del indiscutible ejemplo de perseverancia, esfuerzo y superación, que, por lo bajo, resulta inspirador.
Esperemos que se siga dando importancia a los logros de nuestros deportistas, que la opinión pública destaque sus resultados y que, de una vez por todas, avancemos hacia una sociedad más inclusiva.
Rossanna Oyarzún L.
Directora Ejecutiva – AVANZA Inclusión
